Bienaventurado el que lee, y los que oyen las palabras de esta profecía, y guardan las cosas en ella escritas: porque el tiempo está cerca.Apocalipsis 1.3.
<> DIOS mío, Dios mío, ¿por qué me has dejado? ¿Por qué estás lejos de mi salud, y de las palabras de mi clamor?
2
Dios mío, clamo de día, y no oyes Y de noche, y no hay para mí silencio.
3
Tú empero eres santo, Tú que habitas entre las alabanzas de Israel.
4
En ti esperaron nuestros padres: Esperaron, y tú los libraste.
5
Clamaron á ti, y fueron librados: Esperaron en ti, y no se avergonzaron.
6
Mas yo soy gusano, y no hombre Oprobio de los hombres, y desecho del pueblo.
7
Todos los que me ven, escarnecen de mí Estiran los labios, menean la cabeza, diciendo:
8
Remítese á Jehová, líbrelo Sálvele, puesto que en él se complacía.
9
Empero tú eres el que me sacó del vientre, El que me haces esperar desde que estaba á los pechos de mi madre.
10
Sobre ti fuí echado desde la matriz: Desde el vientre de mi madre, tú eres mi Dios.
11
No te alejes de mí, porque la angustia está cerca Porque no hay quien ayude.
12
Hanme rodeado muchos toros Fuertes toros de Basán me han cercado.
13
Abrieron sobre mí su boca, Como león rapante y rugiente.
14
Heme escurrido como aguas, Y todos mis huesos se descoyuntaron: Mi corazón fué como cera, Desliéndose en medio de mis entrañas.
15
Secóse como un tiesto mi vigor, Y mi lengua se pegó á mi paladar Y me has puesto en el polvo de la muerte.
16
Porque perros me han rodeado, Hame cercado cuadrilla de malignos: Horadaron mis manos y mis pies.
17
Contar puedo todos mis huesos Ellos miran, considéranme.
18
Partieron entre sí mis vestidos, Y sobre mi ropa echaron suertes.
19
Mas tú, Jehová, no te alejes Fortaleza mía, apresúrate para mi ayuda.
20
Libra de la espada mi alma Del poder del perro mi única.
21
Sálvame de la boca del león, Y óyeme librándome de los cuernos de los unicornios.
22
Anunciaré tu nombre á mis hermanos: En medio de la congregación te alabaré.
23
Los que teméis á Jehová, alabadle Glorificadle, simiente toda de Jacob Y temed de él, vosotros, simiente toda de Israel.
24
Porque no menospreció ni abominó la aflicción del pobre, Ni de él escondió su rostro Sino que cuando clamó á él, oyóle.
25
De ti será mi alabanza en la grande congregación Mis votos pagaré delante de los que le temen.
26
Comerán los pobres, y serán saciados: Alabarán á Jehová los que le buscan: Vivirá vuestro corazón para siempre.
27
Acordarse han, y volveránse á Jehová todos los términos de la tierra Y se humillarán delante de ti todas las familias de las gentes.
28
Porque de Jehová es el reino Y él se enseñoreará de las gentes.
29
Comerán y adorarán todos los poderosos de la tierra: Postraránse delante de él todos los que descienden al polvo, Si bien ninguno puede conservar la vida á su propia alma.
30
La posteridad le servirá Será ella contada por una generación de Jehová.
31
Vendrán, y anunciarán al pueblo que naciere, Su justicia que él hizo.