Bienaventurado el que lee, y los que oyen las palabras de esta profecía, y guardan las cosas en ella escritas: porque el tiempo está cerca.Apocalipsis 1.3.
Y EL quinto ángel tocó la trompeta, y vi una estrella que cayó del cielo en la tierra y le fué dada la llave del pozo del abismo.
2
Y abrió el pozo del abismo, y subió humo del pozo como el humo de un gran horno y oscurecióse el sol y el aire por el humo del pozo.
3
Y del humo salieron langostas sobre la tierra y fueles dada potestad, como tienen potestad los escorpiones de la tierra.
4
Y les fué mandado que no hiciesen daño á la hierba de la tierra, ni á ninguna cosa verde, ni á ningún árbol, sino solamente á los hombres que no tienen la señal de Dios en sus frentes.
5
Y le fué dado que no los matasen, sino que los atormentasen cinco meses y su tormento era como tormento de escorpión, cuando hiere al hombre.
6
Y en aquellos días buscarán los hombres la muerte, y no la hallarán y desearán morir, y la muerte huirá de ellos.
7
Y el parecer de las langostas era semejante á caballos aparejados para la guerra: y sobre sus cabezas tenían como coronas semejantes al oro y sus caras como caras de hombres.
8
Y tenían cabellos como cabellos de mujeres: y sus dientes eran como dientes de leones.
9
Y tenían corazas como corazas de hierro y el estruendo de sus alas, como el ruido de carros que con muchos caballos corren á la batalla.
10
Y tenían colas semejantes á las de los escorpiones, y tenían en sus colas aguijones y su poder era de hacer daño á los hombres cinco meses.
11
Y tienen sobre sí por rey al ángel del abismo, cuyo nombre en hebraico es Abaddon, y en griego, Apollyon.
12
El primer ¡Ay! es pasado: he aquí, vienen aún dos ayes después de estas cosas.